La guerrilla, en un fardo.

Cultura
EL MUNDO 27/05/2001

Andrés Trapiello desempolva una historia del «maquis» en el Madrid de 1945.
El hallazgo providencial de un fardo de papeles antiguos y deteriorados en un viejo puesto de libros de lance puso al escritor Andrés Trapiello tras la pista de un olvidado episodio del maquis en el Madrid de 1945.

Una historia protagonizada por personas que luchaban por su libertad en circunstancias difíciles y que estaban condenadas al anonimato de no haber suscitado el interés de este escritor leonés, que ha reconstruido aquel episodio en el libro La noche de los Cuatro Caminos (Aguilar).

José Vitini Flórez, Juan Casin Alonso, Félix Plaza Posadas, Domingo Martínez Malmierca, José Carmona Valdeolivas o Luis del Alamo García eran algunos de los nombres impresos en aquel montón de viejos papeles que, bajo el rótulo Delitos contra la Seguridad del Estado, reposaban en una de las remozadas casetas de libros usados de la Cuesta de Moyano.

«Aquellos papeles me pusieron tras la pista de una historia apasionante», reconoce Andrés Trapiello. «Gracias a ellos, pude reconstruir la historia de la escasísima guerrilla de Madrid y la vida de unos hombres de carne y hueso que aglutinaban un interesante componente político, humano y literario».

Andrés Trapiello, autor de Las armas y las letras y Rama desnuda entre otros libros, reconstruye en 14 capítulos, concretamente, la historia de siete hombres fusilados al amanecer de un 28 de abril de 1945, tras asaltar una delegación de la Falange y asesinar a dos de sus miembros. «Es el primer caso de una acción guerrillera que trascendió a los periódicos, sometidos entonces a una censura férrea», explica Andrés Trapiello, «pero en esa ocasión el régimen de Franco organizó una manifestación patriótica para mostrar a los aliados que España no era como Francia y que Franco no era como Petain».

Tras el hallazgo de los papeles, Andrés Trapiello se puso a investigar, leyó libros, historias del Partido Comunista, documentos, memorias de la época, rastreó en las guías telefónicas los nombres inscritos en el informe, habló con algunos supervivientes, peregrinó por los archivos y encontró, finalmente, en un archivo militar, el sumario del consejo de guerra que buscaba: unos 200 folios en los que se sigue todo el proceso contra Vitini y diez más.

En La noche de los Cuatro Caminos no se pretende juzgar el maquis ni tomar partido por nadie, porque, reconoce Andrés Trapiello, «no es una historia idealizada ni épica, sino protagonizada por personas que se vieron obligadas a cometer actos terribles e innobles. Sólo he tratado de comprender a quienes unos días hacían de héroes y otros, de menos héroes, y a mucha gente anónima que tenía ganas de dejar de hablar de una vez de la Guerra Civil».

Debido a las circunstancias de la gestación de La noche de los Cuatro Caminos, su autor rinde en sus páginas también un emotivo homenaje a la Cuesta de Moyano, ese lugar abigarrado y luminoso donde los libros antiguos y de saldo asaltan a quienes son capaces de verlos. Y eso fue lo que le pasó a Andrés Trapiello cuando una mañana paseaba por la madrileña Cuesta de Moyano, que se tropezó, porque le estaba esperando, con un fardo de papeles encabezados por el rótulo Delitos contra la Seguridad del Estado. No en vano el descubridor de aquel tesoro documental, de cuyo destino actual sólo ofrece conjeturas, afirma que «los papeles ofrecen muchísima resistencia a desaparecer».

Seguramente por agradecimiento a los comerciantes de añejas bibliotecas, Andrés Trapiello prepara un libro que piensa titular El lance de libros viejos.

1 comentario: